El estreñimiento en el embarazo es un problema común debido a los cambios hormonales que se hacen presentes en esta etapa. Este puede ser un síntoma bastante incómodo, especialmente si eres una madre que consume poca fibra. Cabe recordar que la fibra es parte fundamental de la dieta saludable, muy conveniente para tu organismo y para tu bebé.
Este trastorno es precursor de síntomas más molestos y duraderos, como por ejemplo las hemorroides, así que empieza desde ya con acciones en contra de este pequeño y común síntoma.
Una de las principales acciones debe ser aumentar el consumo de agua (aprende un poco de otros beneficios del agua en nuestro artículo sobre hidratación). En segundo lugar, debes aumentar el consumo de fibra total en tu dieta. Con dos porciones que incluyan verduras, frutas con cáscara o legumbres, estás cumpliendo el mínimo de fibra necesaria. Pero si lo que necesitas es ayudarle un poco a tu organismo con el tránsito intestinal, debes también adicionar el consumo de salvado de avena, ciruelas, pasta integral y finalmente debes intentar lograr un horario de entrada al baño. Una clave para lograrlo puede ser el tener un poco de actividad física previa, ya que el ejercicio moviliza todo el intestino.
Si aun con estas acciones preventivas tienes grandes problemas a la hora de ir al baño, debes hablar con tu médico, el cual podrá recomendarte diferentes opciones: desde un suplemento de fibra en tu dieta, hasta laxantes suaves, o alguna alternativa natural. No dudes en comunicarle cualquier duda.
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